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Diego Vallarino

Profesor full time del EGADE Business School, Tec de Monterrey. Director Nacional del Master en Business Analytics del EGADE Business School. Monterrey, Mexico

31 enero, 2025

. 8 minutos de lectura.

Los avances rápidos en inteligencia artificial (IA) han llevado a un auge sin precedentes en la valoración de las empresas tecnológicas. Gigantes como Microsoft, Google y Nvidia han obtenido enormes beneficios gracias a la revolución de la IA, impulsada por la demanda de modelos computacionales de gran escala y la infraestructura que los respalda. Sin embargo, la reciente aparición de DeepSeek, una empresa china de IA, ha introducido una nueva dimensión en el panorama competitivo. Con su enfoque rentable para el entrenamiento y la implementación de modelos, DeepSeek ha generado preocupaciones sobre la sostenibilidad del actual clima de inversión en IA. El sector de la IA, a menudo comparado con burbujas tecnológicas anteriores, podría estar enfrentando una reevaluación de sus supuestos fundamentales. Este ensayo explora si la disrupción de DeepSeek señala una corrección en la valoración de la IA o si los inversores han subestimado el alcance de su impacto en el ecosistema financiero de la inteligencia artificial.

La respuesta del mercado a la irrupción de DeepSeek

A simple vista, la entrada de DeepSeek en la carrera de la IA podría parecer solo otro competidor más desafiando a los jugadores establecidos. Sin embargo, la reacción inmediata en los mercados financieros sugiere un cambio más profundo. Tras el anuncio de DeepSeek-R1, se produjo una importante venta masiva de acciones vinculadas a la IA, con Nvidia perdiendo aproximadamente un 17% de su capitalización de mercado y otras empresas del sector experimentando caídas similares. En total, se eliminaron más de un billón de dólares del sector tecnológico, lo que generó alarmas sobre la sostenibilidad de las actuales valoraciones de la IA.

Una reacción tan drástica sugiere que los inversores están comenzando a incorporar los riesgos asociados con una mayor competencia y la disminución de las barreras de entrada en el desarrollo de IA. A diferencia de OpenAI, que ha dependido de inversiones sustanciales de Microsoft para mantener su ventaja, se informa que DeepSeek entrenó su modelo con solo el 5% del costo típicamente asociado con los modelos de IA líderes. Esta revelación tiene implicaciones profundas: si los modelos de IA pueden desarrollarse y entrenarse a costos significativamente más bajos, entonces las ventajas monopolísticas de los grandes jugadores pueden ser más frágiles de lo que se pensaba.

El paradigma de la valoración de la IA: Eficiencia vs. Percepción del mercado

Hasta ahora, el sector de la IA ha operado bajo el supuesto implícito de que el dominio del mercado se determina por el acceso al capital, los recursos computacionales y los datos propietarios. Nvidia, por ejemplo, ha sido el principal proveedor de GPUs orientadas a IA, y su valoración refleja las expectativas de un dominio continuo en el hardware de IA. De manera similar, Microsoft y Google han construido un poder de mercado sustancial a través de sus ofertas de IA en la nube, que dependen de una vasta infraestructura computacional.

DeepSeek desafía estos supuestos al demostrar que la IA puede desarrollarse con mayor eficiencia, aprovechando arquitecturas optimizadas y estrategias de entrenamiento rentables. Esto plantea una pregunta fundamental: ¿han sobrestimado los mercados financieros la intensidad de capital requerida para el desarrollo de IA? Si más empresas siguen el camino de DeepSeek y logran resultados competitivos con modelos más eficientes y menos recursos, la percepción de la escasez de capacidades de IA podría disminuir, lo que llevaría a una reevaluación de las valoraciones de las acciones relacionadas con la IA.

Desde una perspectiva financiera, la analogía con la burbuja tecnológica de finales de los 90 se vuelve relevante. En aquel entonces, el auge de internet llevó las valoraciones de las empresas a niveles astronómicos bajo la suposición de que el dominio se determinaría por la captura del mercado y enormes inversiones de capital. Sin embargo, a medida que mejoraron las eficiencias tecnológicas y la competencia se intensificó, muchas empresas colapsaron bajo el peso de la sobrevaloración. Un ejemplo clave es Netscape, que inicialmente dominó el mercado de navegadores web pero fue rápidamente desplazado por Internet Explorer de Microsoft a medida que las tecnologías web evolucionaban y las fuerzas competitivas reconfiguraban la industria. De manera similar, Amazon Web Services (AWS) revolucionó el mercado de la computación en la nube al ofrecer infraestructura escalable y rentable, cambiando fundamentalmente la forma en que las empresas abordaban el gasto en TI. Este cambio obligó a los jugadores tradicionales a adaptarse o perder relevancia, de manera similar a lo que DeepSeek podría estar haciendo en el panorama de la IA hoy en día.

Si la IA está entrando en una fase similar, en la que emergen rápidamente alternativas de menor costo, entonces los líderes del mercado de hoy pueden enfrentar correcciones en su valoración similares a las vistas en la era de las puntocom. La capacidad de mantener altos gastos de capital podría dejar de ser una barrera de entrada suficiente si los nuevos competidores pueden desarrollar modelos competitivos a una fracción del costo.

El panorama competitivo: Cambio en las dinámicas de poder

Más allá de los mercados financieros, la disrupción de DeepSeek también señala un posible cambio en la dinámica del poder en la IA. Durante años, las empresas occidentales de IA han liderado el sector, beneficiándose de inversiones tempranas, acceso a talento de primer nivel y la infraestructura para entrenar modelos de IA a gran escala. Sin embargo, el modelo de DeepSeek refleja un enfoque estratégico más amplio de China hacia la tecnología: lograr la paridad o la superioridad en sectores clave mediante la innovación en costos en lugar de la inversión masiva de capital.

El enfoque chino en el desarrollo de IA se ha caracterizado por mejoras agresivas en eficiencia, colaboración público-privada y subsidios estatales estratégicos. Esto contrasta con el modelo occidental, que ha estado impulsado principalmente por inversión privada, capital de riesgo y financiamiento corporativo. Si el éxito de DeepSeek es replicado por otros actores en China, podría erosionar el dominio de las empresas de IA con sede en EE.UU. y trasladar el poder financiero hacia competidores más eficientes en costos.

Además, el entorno regulatorio en torno a la IA podría acelerar esta transición. Los legisladores estadounidenses ya han impuesto restricciones a la exportación de semiconductores avanzados a China, con el objetivo de frenar su progreso en IA. Sin embargo, el modelo de DeepSeek sugiere que China podría no necesitar acceso a los chips occidentales más avanzados para seguir siendo competitiva. Si esta tendencia continúa, los mercados financieros podrían comenzar a reconocer que el liderazgo en IA ya no depende exclusivamente de las ventajas tecnológicas occidentales, lo que llevaría a más ajustes en las valoraciones.

Implicaciones económicas más amplias

Una posible corrección en la valoración de la IA no se limitaría solo a los precios de las acciones, sino que podría tener efectos macroeconómicos más amplios. La inversión en IA ha sido un motor clave del gasto de capital en tecnología, con empresas invirtiendo miles de millones en centros de datos, producción de chips e infraestructura en la nube. Si las ganancias en eficiencia de la IA reducen el capital necesario para desarrollar modelos competitivos, las empresas podrían reconsiderar sus estrategias de gasto, afectando a proveedores e industrias que dependen de inversiones en IA.

Por ejemplo, el dominio de Nvidia en el mercado de GPUs ha sido impulsado por la suposición de que el entrenamiento de IA seguirá requiriendo enormes recursos computacionales. Si empresas como DeepSeek demuestran alternativas viables que dependen de entrenamiento optimizado en lugar de potencia bruta, la demanda de GPUs de gama alta podría disminuir, desacelerando la trayectoria de crecimiento de Nvidia. De manera similar, los proveedores de servicios en la nube que se han posicionado como indispensables para el entrenamiento de IA podrían enfrentar presión en los precios a medida que las empresas encuentren formas más rentables de entrenar modelos.

¿Corrección necesaria o sobrerreacción?

La irrupción de DeepSeek como un competidor viable en IA ha generado una gran turbulencia en el mercado, obligando a los inversores a reevaluar sus suposiciones sobre el panorama competitivo de la industria. Mientras que algunos ven esto como una corrección necesaria—una señal de que el desarrollo de IA no es tan intensivo en capital como se pensaba—otros argumentan que el mercado ha reaccionado en exceso, subestimando las ventajas que aún poseen los jugadores establecidos.

Independientemente del resultado, la llegada de DeepSeek ha enviado un mensaje claro: la industria de la IA está lejos de ser estática, y los mercados financieros deben mantenerse ágiles en sus evaluaciones sobre su trayectoria futura.